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Del fin rosado.
Posted by Jenso
on
23:44
Érase una vez yo caminando entre comillas, con el ADN perdido entre respiros y mentiras, naufragando, como solo lo saben los náufragos, en una Lima de género estoico. Con ganas de pausar la teoría de mis días, me detengo a hablar de Lima.
Capital romántica de quien en lágrimas fue familiar de la necesidad, un archipiélago de cabezas, con biografía, de clase a, b y c. Juegas, absoluta e indomable, con los dilemas de lo mundano.
Me dices que en los caminos a Roma, también hay que saber detenerse. Me miras y te enfermas, te miro y me enfermo, nos miramos y pactamos en curarnos, como si se tratase de buscar una buena anécdota para mi funeral. Por la lepra expiatoria de tus vidas pérdidas, pierden los edificios sus sonrisas, los árboles sus ladrillos y la gente sus frutos.
¿Llamas a eso respirar?, era cuestión de tiempo para pensar y responder una de las preguntas más pregunta de mi vida.
Érase una vez yo, echado en las comillas, dándole el nombre que quería al ADN, naufragando en la isla de la libertad...
Capital romántica de quien en lágrimas fue familiar de la necesidad, un archipiélago de cabezas, con biografía, de clase a, b y c. Juegas, absoluta e indomable, con los dilemas de lo mundano.
Me dices que en los caminos a Roma, también hay que saber detenerse. Me miras y te enfermas, te miro y me enfermo, nos miramos y pactamos en curarnos, como si se tratase de buscar una buena anécdota para mi funeral. Por la lepra expiatoria de tus vidas pérdidas, pierden los edificios sus sonrisas, los árboles sus ladrillos y la gente sus frutos.
¿Llamas a eso respirar?, era cuestión de tiempo para pensar y responder una de las preguntas más pregunta de mi vida.
Érase una vez yo, echado en las comillas, dándole el nombre que quería al ADN, naufragando en la isla de la libertad...